Acorde a Naciones Unidas, una de cada tres mujeres sufren violencia sexual o física al menos una vez a lo largo de sus vidas. Este dato, combinado con otra afirmación de la organización, que indica que el 86% de mujeres y niñas viven en países sin sistemas de protección legal contra la violencia de género evidencia una vez más la urgencia de la toma de medidas para erradicar este fenómeno.
Pero la violencia se extiende más allá de lo físico y sexual. También existe la violencia psicológica, emocional y económica, en la cual se mantiene un control, y por consiguiente dependencia, de las mujeres al no permitirles acceder por ejemplo, a un trabajo remunerado y en el caso de las niñas, a la educación.
Cada vez más testimonios, datos, instituciones, gobiernos y medios de comunicación muestran que se trata de un problema de salud pública y una violación a los derechos humanos con una magnitud e impacto global, y que factores como la economía mundial, los conflictos entre países o entre territorios internos, e incluso el cambio climático agravan la situación.
Puede que el efecto del cambio climático en la violencia contra las mujeres no sea tan fácil de identificar como los otros ejemplos, pero debe tomarse en cuenta que la alteración del clima es causa de migración, donde las mujeres y niñas son altamente vulnerables a la violencia y explotación.
Recientemente El País publicó un artículo acerca de las más de 1.1 millones de personas desplazadas por motivos climáticos en Latinoamérica. Además, acorde a expertas (os) de la Oficina Regional para Centroamérica, Norteamérica y El Caribe (OIM) las mujeres representan el 48 % de las personas migrantes internacionales a nivel mundial, y cada vez son más las mujeres que migran solas.
El 25 de noviembre, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, marca el inicio de los 16 días de activismo contra la violencia de género, una campaña anual donde se exige eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas e informa acerca de la prevención y su importancia.
Esto último solo puede hacerse a través de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y niñas, el 5 objetivo de Desarrollo sostenible.
Entonces hablemos de soluciones. ¿Cómo trabajamos en SIC4Change para su consecución?
Mejorar el uso de la tecnología instrumental, en particular la tecnología de la información y las comunicaciones, para promover el empoderamiento de las mujeres es una de las metas de este objetivo.
SIC4Change somos una tecnológica que busca soluciones a problemas sociales a través de la innovación y desde nuestra fundación la perspectiva de género ha sido un eje transversal en nuestros programas y proyectos.
Déjanos contarte de SAVIA, nuestra plataforma de envío de información y formación multicanal a colectivos vulnerables
En nuestro programa Savia Ashaninka combinamos acción comunitaria con tecnología para acompañar física y telemáticamente a 350 familias de 16 comunidades nativas en Perú, brindándoles conocimientos que les ayuden a tomar decisiones informadas para mejorar su salud materno infantil.
Usuaria de Savia recibe un mensaje en su teléfono móvil.
Mujeres participantes del programa Savia Asaninka asisten a talleres participativos donde se ponen en valor los estilos de vida saludables, el consumo de productos locales con alto valor nutritivo y la medicina tradicional.
En Guatemala SIC4Change está colaborando con el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) y la Mesa Técnica Agroclimática (MTA) de Chiquimula para ampliar el número de usuarios que reciben información agroclimática. Utilizando la tecnología de Savia enviamos información adaptada, programada y de emergencia, haciendo que agricultoras y agricultores tengan más herramientas para desarrollar prácticas agrícolas resilientes frente a variaciones climáticas.
Además de desarrollar y escalar soluciones, nuestro equipo multidisciplinar también asesora a organizaciones que necesitan generar o maximizar su impacto social. Por ejemplo, para Movimiento por la Paz (MPDL) en Guatemala desarrollamos una aplicación móvil que promotoras de las organizaciones integrantes de la Red de Derivación, dedicada a la atención y acompañamiento de mujeres víctimas de violencia utilizan para el registro de casos de mujeres víctimas de violencia, data de utilidad para que instituciones gubernamentales conozcan la situación en tiempo real y diseñen una estrategia con los recursos necesarios para su prevención y eliminación.
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